domingo, 19 de noviembre de 2023

LA FE EN TIEMPOS DE HAMBRE

 LA FE EN TIEMPOS DE HAMBRE

Gen 26

convozalta.blogspot.com/Jovanni Caballero 201

El hambre duele, lastima y provoca… geográficamente: migraciones, salidas, éxodos; emocionalmente:  frustración, miedo, inseguridad, acortamiento de los horizontes; físicamente: desgastes, decaimiento, muerte; moralmente: nos pone frente a lo fundamental, los límites de lo bueno y lo malo, lo prohibido y lo permitido; socialmente: el hambre es un generador de violencias y un causante de malestares sociales. El hambre tiene causas políticas y naturales. 

Martín Caparrós, periodista que ha documentado ampliamente la experiencia del hambre, dice: “Conocemos el hambre, estamos acostumbrados al hambre: sentimos hambre dos, tres veces al día. No hay nada más frecuente, más constante, más presente en nuestras vidas que el hambre -y, al mismo tiempo, para muchos de nosotros, nada más lejano que el hambre verdadera”. Caparrós recorrió la geografía del hambre, desde la India, Bangladesh, Níger, Kenia y Sudán hasta naciones desarrolladas como Estados Unidos y España. Allí encontró a quienes, por distintas razones -sequías, pobreza extrema, guerras, marginación-, sufren hambre. De sus historias está hecha su investigación “El Hambre”, y de las historias de quienes trabajan en condiciones muy precarias para paliarla, y las de quienes especulan con los alimentos y hambrean a tanta gente. Y, por desgracia, sigue tan vigente. Discurre sobre los mecanismos que hacen que casi mil millones de personas no coman lo que necesitan.

En el texto Dios invita a Isaac a quedarse en Gerar, tierra desértica, contra todos los pronósticos. Tomemos esta “invitación” como eje para mirar el texto y para nuestra reflexión. Veamos este texto en tres grande bloques o partes.

            1. GERAR ANUNCIADO, VV. 1-5. En tiempos de hambre Dios invita a Isaac, contra todos los pronósticos, a “migrar” a Gerar, “tierra desértica” en vez de Egipto, la opción más viable, tierra con más abundancia. En su condición vulnerable de migrante y forastero Dios promete estar con él y bendecirlo. En Levíticos 19 ser santo era, entre otras, acoger bien al inmigrante. La “bendición” a Isaac estará conectada con la promesa a Abraham: “en ti serán benditas todas las familias de la tierra”. A Isaac se le recuerda que la bendición no tiene un fin en sí misma, que la bendición para que no se corrompa o se pervierta debe circular, que la bendición tiene un horizonte superior más allá del individuo o del clan. Será bendecido para bendecir. En ese tiempo las tribus no se bendecían, se conquistaban, se peleaban, se destruían; Isaac es invitado a actuar “contra cultura”. La bendición, diríamos, tiene un horizonte evangélico (Gal 3:8). HOY, dale gracias a Dios por llevarte al lugar donde estas, dale gracias por lo que tienes, pero también, pregúntate, ¿a quién puede bendecir con lo que Dios me ha dado? Haz algo “contra cultura”, comparte.  

              2. GERAR HABITADO, VV. 6- 22. Con la llegada a Gerar y la habitación llegan los problemas, aparecen los conflictos. En lo personal Isaac miente por miedo para guardar su pellejo (poniendo en riesgo a su esposa). La mentira es un patrón patriarcal y un “recurso en tiempos de peligro”: se da con Abraham, Isaac también miente y Jacob, quien llegará a ser “la tapa del frasco”, hace lo propio. Abimelec, rey filisteo, se muestra más piadoso y con una ética más alta que la del mismo Patriarca “elegido” Isaac. Dios trabaja con vida rotas; Dios escribe recto en renglones torcidos; Dios se mueve entre nuestras luces y nuestras sombras. Su gracia es más fuerte que nuestras des-gracias. En lo “laboral” Isaac, ya exitoso, enfrenta la envidia de los filisteos. Isaac, aunque sabe que esa tierra será de él algún día, no responde con arrogancias, declaraciones alegres de fe u orgullos en nombre de Dios. Isaac sabe que la tierra (promesa) se conquista trabajando, también sabe que la promesa de bendición no exime los problemas y los conflictos. Hoy, revísate, ¿cómo respondes ante el peligro personal y el conflicto laboral?, dale gracias a Dios por haberte llevado a donde estas, camina allí con humildad, con sencillez; no uses la fe (la promesa) para dominar, para enorgullecerte, para imponerte. Dale gracias a Dios porque sigue escribiendo recto a través tuyo, un renglón torcido.  

             3. GERAR ABANDONADO, VV. 23-35. Isaac sube a Beerseba (“Pozo de juramento), la envidia lo expulsa de Gerar. El lugar de bendición se convierte en lugar de expulsión por el tóxico de la envidia. Sale de Gerar sin mayores apegos y pretensiones. En Beerseba Dios sigue caminando con Isaac y este sigue siendo bendecido allí. ¡Qué Dios tan extraño este! No está en un monte, en un lugar sagrado o en un templo, como los demás, camina con la gente. Isaac percibe que Dios está, le ha dado agua y tierra, le ha hecho hacer las paces con “los envidiosos”, entonces levanta un altar y adora. Otra extrañeza de este Dios: el altar es el resultado de su aparición y no su causa. Levantar un altar es “hacer un alto” para que la experiencia de Dios no se vuelva común. Un altar es un lugar para celebrar, recordar y agradecer. El texto cierra con un comentario familiar, nos cuenta los desgarros que producen las malas decisiones de los hijos en el corazón de los padres. Isaac es un hombre bendecido con una familia “normal” no una súper familia o familia perfecta. Como dicen los mayores: “no hay felicidad completa”.  HOY, haz un altar, haz un alto en el camino para celebrar, recordar y agradecer a Dios por todo. Ponte al día con quienes te han dañado, con quienes te han ofendido. Pero también, acepta, si, acepta la fragilidad de la vida y su contingencia, acepta que “no hay felicidad completa”, que la vida es compleja, que las malas decisiones de quienes nos acompañan entristecen el alma. Aun así, sigue caminando, sigue trochando, Dios está contigo. No pierdas el carácter itinerante de la fe”, la fe como camino, como salida, como un “sal de tu tierra”. Si. Salta, el piso aparecerá después.   

            En el horizonte evangélico planteado dijimos que el hambre aparece en el NT como una situación difícil pero también como un escenario para encontrar a Jesús. Jesús dijo: “tuve hambre y me diste de comer” (Mt 25:35). Decíamos, esta semana, da de comer a un necesitado, a un hambriento. El golpe incómodo y perturbador de alguien en la puerta de la casa puede ser Jesús gritando: “¡Tengo hambre!”.

martes, 26 de septiembre de 2023

ADULAM, EL BAR DEL VECINDARIO

 

ADULAM, EL BAR DEL VECINDARIO

convozalta.blogspot.com/Jovanni Caballero 200

Una palabra clave en el primer libro de Samuel es “Transición”; esta marca la lectura del texto de principio a fin: hay transición entre personajes: de Eli a Samuel, de Samuel a Saúl, de Saúl a David; y también existe una transición en la forma de gobierno: de los jueces a la monarquía. El texto entonces nos introduce a una atmosfera de cambios, de altibajos políticos y religiosos, pero sobre todo nos plantea el hecho de la providencia divina guiando los hilos de la historia a través de protagonistas “muy humanos”.

El relato de la “Cueva de Adulam” lo encontramos en 1 Samuel 22. Lo que allí está sucediendo es resultado de lo que pasó en el capítulo 21 donde David tiene que huir de Saul que por celos quiere matarlo, asesinarlo. David es un perseguido político.  En su fuga David sale de las ciudades, y se refugia en la caverna de Adulam, a 27 kms de Jerusalén, ahí llega su familia a verlo, logra refugio para ellos con el rey de Moab. Pero, a la caverna de Adulam llegan también buscando refugio: afligidos, endeudados y amargados en espíritu, unos cuatrocientos hombres que ya no tenían nada que perder forman parte del escuadrón de fugitivos como David, se forma un batallón: "La Guerrilla por Israel". Todos con la idea de cambiar el destino de sus vidas”.

Una definición de términos para continuar: Adulam significa “lugar de refugio”. Guerrilla es un diminutivo de Guerra y, ha llegado a significar una suerte de “Subversión” frente a un orden político oficial imperante que trae opresión e injusticia. El grupo que aquí se presenta en términos generales, luego se detalla y se les conoce como “Los valientes de David” (2 Samuel 23). Allí se les describe como valientes hombres de guerra, armados. Se juntan con David porque ven en él el reflejo de un reinado mejor, tienen “Sueños de cambio”. En América Latina, muchos cambios y revoluciones han estado asociados a movimientos de Sub-versión. Orlando Fals Borda, el llamado Padre de la Sociología en Colombia, analiza ese hecho en “La subversión en Colombia: el cambio social en la historia”. Y, más allá del asunto de las armas, el Movimiento de Jesús y la Reforma misma, significaron “sub-versiones” frente a versiones de poder oficiales (El canto de María así lo propone). Teológicamente David había sido elegido por Dios para ser rey; políticamente, y cuando las guerras eran comunes, David se preparaba, con soldados, para cuando llegara el momento. Y, ¡Que grupo!

Vinieron a David… 1). Todos los oprimidos: estos estaban bajo presión, bajo estrés. Había muchas personas bajo presión. 2). Todos los endeudados: la palabra hebrea da la idea de “prestar con intereses, tener un numero de acreedores”. Eran personas que no podían pagar sus deudas. 3). Todos los amargados de espíritu: los que tenían amargura en el alma, los que habían sido agraviados y maltratados.

Estas tres descripciones suponen una crítica política: en esos días la nación estaba sufriendo bajo el gobierno de Saul. Había puesto impuestos demasiado altos al pueblo y los había maltratado. Era un loco, sujeto a depresiones profundas, y la gente estaba sufriendo las consecuencias. Algunos no pudieron soportarlo más y por eso la cueva de David terminó llena de descontentos. ¿Se lo imaginan? Estar uno en una cueva solo, sintiéndose como un gusano, es bastante malo, ¡pero tener más de 400 gusanos reunidos allí con uno, es un caos! Pero Dios está obrando ahí. ¡Qué iglesia esta! David es un pastor roto para gente rota.

En el libro “Las 21 leyes irrefutables del liderazgo” de John Maxwell, más específicamente en la novena ley, que denomina “Ley del magnetismo”, el autor afirma que un líder solo atraerá a aquellas personas que se parecen a él o a ella. Dicho de otra manera, que las personas que son como tú, te buscarán. Todos ellos veían en David posibilidad de cambio, David los inspiraba. En Adulam encuentran un lugar para hablar de "eso", de las aflicciones, las deudas y amarguras sin censura; en Adulam encuentran reposo. Claro. No faltaron los que decían que David y sus Insurgentes, que no se sometían, querían dividir El Reino y hacer uno nuevo, cuando lo que querían era Reformarlo.

Más tarde, estos "amargados, afligidos y endeudados", "lo peorsito de la sociedad", fueron llamados "Los valientes de David" (2 Sam 23). Pues, revelarse contra las tiranías, internas y externas, formar una Cueva Adulam para hablar sin tapujos de todo y sanar, buscando cambios, eso es de Valientes. El salmo 142 presenta una lectura existencial, orante y poética del evento de la Cueva. Es la "Oración de un Cavernicola".

Cuando las versiones oficiales quieran instalar en nosotros opresión, deudas y amarguras, necesitamos “la sub-versión”, otra versión alternativa de la realidad tirana, que como canta Alejandro Lerner, “se ríe a carcajadas esperando que me canse de buscar”. Necesitamos “lugares-bares” en donde fraternizar.  Necesitamos todos una “Cueva de Adulam”, que sea un refugio sin máscaras para las angustias honestas, los hastíos profundos y las oraciones inconfesables”.

Leí de Swindoll lo siguiente: “El Bar del vecindario es posiblemente el mejor ejemplo que hay del compañerismo que Jesús quiere enseñarle a su iglesia. Es una imitación que ofrece licor en vez de Gracia, escape en vez de realidad; pero es un compañerismo permisivo, lícito y aceptado que no es motivo de escándalo, y es democrático. Uno puede contarle sus secretos a las personas y éstas no se los cuentan a los demás, porque además no tienen el deseo de hacerlo. El Bar prospera, no porque la mayoría de las personas son alcohólicas, sino porque Dios ha puesto en el corazón humano el deseo de conocer y ser conocido, amar y ser amado y, por eso, son tantos los que buscan la imitación al precio de unas cuantas cervezas. Creo, con todo mi corazón, que Cristo quiere que su iglesia sea... una comunidad fraternal en la que la gente pueda venir y decir: “Estoy acongojado”, “Estoy por el suelo”, “Ya no doy más”.

 ADULAM, EL BAR DEL VECINDARIO.